Un líder sectario y seis mujeres rusas fueron detenidas el pasado viernes en el Aeropuerto de Bariloche cuando estaban por abordar un vuelo, sospechosos de formar parte de una red de trata de personas originaria de la República de Montenegro, un país balcánico, en los años 90´.

Se trata de Konstantin Rudnev, cabeza de una secta llamada Ashram Shambala, quien se concebía asimismo como un dios de la estrella sirio. El hombre había sido arrestado en 2010 luego de que le encontraran una bolsa de heroína y fue condenado en agosto de 2013 a once años de cárcel en Siberia por abusar sexualmente de sus seguidoras. 

La detención de Rudnev había sido solicitada por el fiscal Fernando Arrigo y pudo concretarse la semana pasada cuando personal policial irrumpió en el aeropuerto y lo capturó luego de que intentara cortarse el cuello con una hoja de afeitar. 

Junto a él fueron detenidas seis mujeres de aspecto demacrado, las cuales serán investigadas para determinar si fueron víctimas del abusador o si son cómplices de la red de trata. 

Tras la aprehensión de los primeros siete sospechosos fueron apresadas otras dos mujeres a las afueras del aeropuerto y a tres hombres de nacionalidades mexicana, brasileña y rusa en el Jorge Newbery de Ciudad de Buenos Aires. 

Además de los más de 10 detenidos, en el operativo secuestraron 131 pastillas de cocaína, dos camionetas, 12 teléfonos celulares, un teléfono satelital, un tres notebooks, 10 chips de celulares, más de 14 mil dólares, más de un millón de pesos, y documentación relevante para la causa. 

La investigación

Las operaciones del líder sectario en Argentina comenzaron a salir a la luz el pasado 21 de marzo en el Hospital Ramón Carrillo de Bariloche cuando dos mujeres acompañaron al lugar a una joven rusa, que se sospecha es menor de edad, que estaba embarazada.

El hecho levantó sospechas cuando las acompañantes entraron en pánico al ser cuestionadas sobre su parentesco con la embarazada, se negaban a dejar a la joven hablar y rompieron los papeles donde constataron la identidad del padre. 

En consecuencia, se avisó a las autoridades y la Fiscalía impuso una vigilancia discreta sobre el nosocomio para aguardar el regreso de las tres mujeres, quienes regresaron ese mismo día para que la embarazada entre en parto. 

Las dos acompañantes eran de nacionalidad rusa, ya no podían permanecer en territorio nacional según sus datos registrados en Migraciones y fueron arrestadas. Otras dos señoras rusas asistieron al hospital para preguntar sobre la salud de la joven que dio a luz, por lo que resultaron aprehendidas. 

No obstante, esas sospechosas fueron liberadas junto a otras detenidas en los primeros allanamientos que se dictaron por el caso, aunque la investigación continuó debido a que se secuestró documentación donde figuraba el líder sectario, lo que culminó con su arresto el viernes pasado. 

Tanto Rudnev como sus supuestas seguidoras buscaban abordar un vuelo hacia Buenos Aires y desde ahí partir hacia Brasil. Con todas las pruebas recopiladas, Arrigo presentará el caso ante el juez federal Gustavo Zapata. 

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